Ayer (lunes), se abrió al público el puente peatonal Bicentenario tras más de nueve meses de que inició su construcción; sin embargo, hay a quienes esta obra no convence del todo y opinan que dará seguridad solo a los usuarios de la ciclopista.
Hernán Sánchez, comentó que la intención de edificar el puente le parece noble, ya que hacía falta uno para que la gente cruce más segura.
“Definitivamente está mal planeado, los acabados son malos, las dimensiones y el ángulo, no son los correctos, no creo que todos los usuarios puedan aprovecharlo y finalmente, refleja los interés que puede tener detrás la obra”.
Romario y Camila, jóvenes usuarios del Sendero Intermunicipal de Movilidad Alterna (SIMA), no le ven tanta utilidad y además de la tardanza en la construcción, consideran que tiene algunas fallas en la plancha de concreto, incluso observan algunas grietas. “Se ven algunas fallas en el piso, pero bueno, se le deberá dar uso”.
Gustavo Monroy, ve al puente como una buena opción para evitar el riesgo de atropellamiento a los usuarios, pues sostuvo que sí era un peligro cruzar el bulevar Tomas Alva Edison y con este puente habrá muchas personas que se pueden salvar.
No obstante, las personas adultas mayores y las que no están acostumbradas al ciclismo o al ejercicio, consideran que la pendiente está muy prolongada.
El señor José Luis, quien ayer paseaba a su mamá en una silla de ruedas por la ciclopista, reconoció la dificultad de la pendiente, tanto para subir como para bajar, ya que está muy inclinada y tuvo que hacer uso de un cinturón para asegurar a su madre. “Debió ser más largo para que la pendiente se aligerara porque si es muy pesada”.
Rufina Morales, habitante de la colonia Estrella, indicó que está bien para los usuarios de la ciclopista porque muchos se pasan el alto del semáforo, pero a ella y a sus vecinos no les servirá de nada, ya que cruzan de oriente a poniente y viceversa el bulevar Bicentenario.
“El puente, es para los que vienen a caminar y andar en bicicleta en el sendero, pero para nosotros no, de todos modos debemos cruzar por abajo”, detalló la entrevistada.
Durante el tiempo que se hizo el sondeo, se observó la necesidad de las rampas laterales que dieran acceso o salida a la avenida Tomas A. Edison, mismas que, según lo declarado por Erik de Jesús González, ex secretario de Desarrollo Urbano, Obras Públicas y Medio Ambiente, en una reunión con vecinos de las colonias involucradas, el contratista se había comprometido a realizarlas, pero quedaron en el olvido.
Finalmente, otro de los puntos a cuidar es la velocidad con la que descienden los ciclistas, ya que algunos usuarios consideran que es excesiva para un sitio que se comparte con peatones de diferentes edades y personas con capacidades diferentes