Un árbitro fue agredido por un futbolista cuando terminaba un encuentro. El golpe propinado contra silbante fue en el rostro, lo cual provocó que quedara inconsciente durante 15 minutos aproximadamente.
Fabián León Ruiz, detalló que se celebraba el encuentro entre los equipos Santa Rosa y Los Carsa de Santiago Tulantepec, en la cancha de Santa Rosa, en el municipio de Acatlán, correspondiente a la Liga Premier de Veteranos de Tulancingo.
El agraviado, especificó que corría el minuto 40 de la segunda parte y el marcador favorecía a los locales, cuando marcó una falta y le reclamaron airadamente los del equipo Santa Rosa.
“Como ya estaba muy caliente el partido y faltaba muy poco de tiempo, decidí acabarlo. El portero y algunos jugadores, se me fueron a golpes y yo los esquivaba; sin embargo, me resbalé y justo al caer, uno de estos jugadores me dio una patada en el rostro”.
León Ruiz, agregó que hasta ahí se acuerda. “Cuando desperté mi esposa estaba muy asustada, me dijo que mis ojos se quedaron en blanco. El agresor, me platicó mi esposa, dijo ya me lo chin…, abordó su motocicleta y se fue.”
El árbitro, se comunicó con un abogado y le sugirió que fuera al Hospital General de Tulancingo, pero no había médico legista, por lo que tuvo que acudir con una doctora, en forma particular, quien le aplicó una inyección para desinflamar el cerebro.
Luego acudió a las oficinas de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), ubicadas en la carretera Tulancingo-Santiago Tulantepec, donde el agente del Ministerio Público le dijo que sus lesiones no eran de consideración y le recomendaba, que mejor llegara a un arreglo con el agresor y le pagaran sus gastos, ya que si se iniciaba una carpeta de investigación, de todos modos, se le iba a solicitar a este último que le pagara sus gastos médicos.
Finalmente, expresó que esperará la determinación que tome también el presidente de la citada liga, José Luis Sánchez, sobre estos hechos violentos.
No es la primera ocasión, que un árbitro es objeto de una agresión, incluso el 7 de noviembre de 2016, cuando un jugador del equipo Canarios en el partido contra el Lindavista, de la Liga Distrital de futbol, le asesto un cabezazo al silbante, quien murió en forma inmediata