Hace unos días vimos imágenes a través de internet y de televisión, que hubiéramos querido pensar que fueran de una película de ciencias ficción, cuando en realidad era aquello que ocurrió en Israel.
Un grupo, para muchos considerado terroristas denominado Hamas, en un día festivo para el pueblo de Israel, perpetró un ataque impensable comenzando con una serie de agresiones aéreas a las principales ciudades israelíes, para posteriormente ingresar a su territorio y por medio de diversos grupos armados, atacar y asesinar a diversas personas entre ellas civiles.
Me parece que aquello que hemos visto por video, no tiene justificación alguna, puesto que aun en la guerra existen normas que deben de prevalecer y un ataque sin aviso y a centros civiles, dañando a personas inocentes sin justificación, es no solamente un delito de lesa humanidad sino un acto deplorable y por supuesto, que debe de ser condenado por toda la sociedad y la humanidad en su conjunto.
No podemos otorgar valor ni justificación a la actuación establecida por quienes no tienen el menor respeto por la vida de las personas, puesto que los actos no fueron en contra de una nación sino en contra de diversas personas, las cuales eran civiles y en muchos casos menores de edad.
En tal sentido, parece clara que la condena internacional por los ataques perpetrados hacia Israel y lo más importante hacia las personas que se encontraban en dichos lugares, se encuentran más que justificado y debe de ser contundente.
Sin dejar de mencionar los cientos de personas que fueron privadas de su libertad por este grupo y que ahora, son ocupadas como moneda de cambio en un fuego cruzado.
Por tanto, parece que como un Estado Constitucional de Derecho, México debe de alzar la voz y no solo condenar los ataques, sino solidarizarse con las víctimas.
juanfer_lm@jfg