Pachuca.- El activista de la Red por los derechos de la infancia (Redim), Rafael Castelán, lamentó que este año ha sido sumamente difícil para los menores, con quienes se tiene una deuda en varios aspectos como la salud, educación, violencia y seguridad.
Refirió que datos del Coneval, señalaban que uno de cada dos niños vivía en pobreza extrema, sin embargo con la aparición de la pandemia de Covid-19, este porcentaje se incrementó, además de que los daños colaterales que ha traído esta enfermedad, hacen latente que aumente la ocupación del trabajo infantil.
En el marco del Día del Niño, indicó que la infancia ha sido abandonada por el Estado mexicano y la reacción en cadena que trajo la pandemia con una crisis de salud, seguridad, y laboral, pone en riesgo que se incremente el trabajo en los menores o que esto sean reclutados por el crimen organizado.
La niñez lamentó, ha sido invisibilizada en varios aspectos, como el de la educación donde son los adolescentes el rubro donde más ha repercutido, ya que uno de cada dos niños no cuenta con Internet y los maestros, no han podido ser mediadores en este tema.
Indicó que en el caso de los niños de primaria, el Estado ha tenido un mayor enfoque en su educación, sin embargo en los adolescentes estos han sido abandonados ya que únicamente se han limitado a su educación, a través del televisor.
Dijo que es necesario hacer un análisis de las fallas que se ha tenido y corregir y sobretodo, voltear hacia los niños, quienes también han sufrido las repercusiones sanitarias sin que se les haya tomado en cuenta, ni para el control de la pandemia ni para el esquema universal de vacunas, como el sarampión o la polio