Por incumplir las medidas sanitarias dispuestas por las autoridades estatales del cierre de negocios no esenciales debido al Semáforo Rojo y el aumento de casos de Covid-19, personal de la dirección de Reglamentos de Tulancingo auxiliados por elementos de la Policía Municipal, la noche de ayer (sábado), llevaron a cabo la clausura de dos salones de fiestas, uno de ellos habilitado también como bar.
El primer procedimiento lo efectuaron en calle Adolfo López Mateos de la colonia Medias Tierras donde había un aproximado de 250 personas.
Posteriormente las autoridades se dirigieron a la colonia El Cerezo en la calle del mismo nombre donde en la parte alta de una taquería, en un espacio reducido, había un evento donde había más de 150 parroquianos entre ellos menores de edad, donde además se estaba vendiendo alcohol.
Las personas fueron desalojadas y los empleados del municipio colocaron los sellos correspondientes.
Estas actividades se consideran fuera de la Ley, tomando en cuenta que tanto en la Ciudad de Tulancingo, como el Estado de Hidalgo se encuentran en alerta por los altos índices tanto de contagios y fallecimientos por el SARS-CoV2.