El cuerpo de la cantante Gal Costa, fallecida el pasado miércoles, es velado este viernes en el Hall Monumental de la Asamblea Legislativa de Sao Paulo, en una clima de extrema emoción entre los familiares, amigos y seguidores que se acercaron a dar el último adiós a una de las mayores voces de la música brasileña.
La cantante, una de las principales figuras del movimiento tropicalista brasileño junto a Caetano Veloso, Gilberto Gil y Maria Bethania, y con una carrera de cinco décadas, murió a los 77 años en Sao Paulo, por causas que a petición de sus familiares no fueron reveladas. El entierro se celebrará en un ambiente privado para sus allegados.
Fotos divulgadas por la prensa local muestran a su único hijo, Gabriel Costa, de 17 años, a quien la artista adoptó con dos años de edad, y a su viuda, Wilma Petrillo, durante su llegada al velatorio.
En una entrevista con O Globo en 2021, Gal afirmó que la maternidad le había cambiado la vida. “Es un amor, una luz en mi vida. Siempre me hizo sentir bien estar cerca de él Hago todo por él y para él”, aseguró.
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