La prohibición de nacimientos navideños en edificios de gobierno, que planteará la Primera Sala de la Suprema de Justicia de la Nación (SCJN), en el cabildo de Tulancingo, ya es un tema que se encuentra en la agenda de debates.
La síndica procuradora, Lorenia Lira, indicó que habrá que esperar lo que determine la SCJN, aunque no descartó que exista una controversia de contenido social, pues si se está tratando un tema religioso, también abarcarían las ferias y otros eventos de esta índole.
Agregó que al interior de la Asamblea, ya se ha considerado; sin embargo, insistió que hasta que esta propuesta sea un decreto, podrán tomar determinaciones apegadas a derecho.
“En primera instancia tenemos que esperar cuál es la resolución, si hay mayoría será una ley del ámbito federal. Tienen que ser cuatro los votos de los ministros para que quede aprobada esta resolución para que sea constitucional, pero si son tres los votos entonces solamente se aplicaría a un municipio del Estado de Yucatán donde surgió esta polémica”, explicó.
Lira Amador, dijo también este tema, en caso de que se apruebe, va a crear un precedente histórico con repercusiones, que también generarían controversias.
“Sería una cuestión de aplicar la autonomía de los municipios. La colocación adornos y nacimientos navideños tienen que ver con nuestra cultura, también genera derrama económica y específicamente en Tulancingo, no se utilizan los recursos públicos, que es otro de los argumentos para que esta propuesta de ley se concrete”.
Este tema deriva a petición del Ministro de la (SCJN), Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien presentará en la Primera Sala, una iniciativa que busca prohibir la instalación de nacimientos, así como de cualquier tipo de adorno o signo alusivo a la religión en espacios públicos, ni pagados con recursos del erario.
Argumenta que los elementos de escenas bíblicas en la vía pública, violan la libertad religiosa, los principios constitucionales del Estado laico y el principio de igualdad y no discriminación.
Finalmente, dijo Lira Amador, que este asunto repercutirá en el ámbito económico si es que se aprueba, ya que los lugares públicos y gubernamentales donde se colocan adornos y nacimientos navideños, generan una importante derrama económica porque siempre son una atracción para los visitantes que asisten.
“Por tradición, en Tulancingo, durante los días previos a la Navidad, los adornos son espectaculares, por ejemplo en el Centro Cultural Ricardo Garibay, en el Museo del Ferrocarril y otros sitios representativos, además si se prohíben estos simbolismos que pasará con las demás festividades que tienen que ver con la religión, como las ferias”, concluyó