Una de las más grandes investigaciones periodísticas en el mundo, dio como resultado los “Pandora Papers”, con la que se han detectado operaciones de evasión de impuestos de más de 300 mil altos funcionarios públicos, entrenadores de fútbol, artistas y empresarios de varios países que movieron miles de millones de dólares a paraísos fiscales.
En una era de expansión de la desigualdad, los “Pandora Papers” nos ofrece una perspectiva inédita sobre la manera en que opera una economía en las sombras que beneficia al 1% más rico a expensas del resto de la población y nos muestra por qué los gobiernos y los organismos multilaterales han hecho muy poco para acabar con los abusos financieros.
En la filtración, aparecen al menos 3,000 mexicanos de la élite empresarial que se han beneficiado de la condonación de impuestos y que se valen de las más oscuras maniobras para mover sus fortunas al extranjero.
Y aunque hasta ahora sólo se han revelado 9 nombres, son más de 80 personajes relacionados con la política mexicana de diferentes partidos, quienes también prefieren llevar su dinero a otros países y engordar sus fortunas, lo mismo para comprar lujosas propiedades, administrar herencias, o guardar las utilidades de sus negocios, mientras millones de personas son privadas de los servicios básicos: salud, educación, alimentación o empleo.
Por cierto, de Hidalgo, se menciona el nombre de Jesús Murillo Ortega, hijo de Jesús Murillo Karam, pero se harán nuevas revelaciones en las próximas semanas.
Resulta paradójico que los mismos que nos exigen pagar impuestos, estar al corriente de las tenencias y cumplir con nuestras obligaciones fiscales, son los primeros en maniobrar para que sus ganancias no se toquen. Y así es como los pobres se hacen más pobres y los ricos más ricos.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) que encabeza Santiago Nieto Castillo, informó que ya iniciaron una investigación para identificar beneficiarios finales. Ojalá así sea. La caja está abierta
