Por Arturo Hernández Cordero
El 2024, último año del Presidente Andrés Manuel López Obrador al frente del Ejecutivo Federal, por fin ha llegado y con ello, tanto el oficialismo como la oposición se encuentran en la necesidad de replantear sus estrategias de cara a conseguir la simpatía de la ciudadanía mexicana con miras a las elecciones de junio próximo.
Para nadie es un secreto que la precandidata de la 4T, la Dra. Claudia Sheinbaum, le corresponde sustituir el liderazgo carismático y con fuerte aceptación popular que AMLO ha ejercido desde hace casi dos décadas al frente de la izquierda mexicana, y que Sheinbaum por su parte, no ha demostrado tener entre sus virtudes políticas ese arrastre popular necesario, que logre aminorar el impacto de las decisiones erradas de la 4T. Por tanto, la 4T tiene la imperante necesidad de encontrar nuevas estrategias para legitimarse, al no contar a día de hoy con una líder carismática que por si sola le represente para la ciudadanía aquella figura mesiánica que quede en el lugar en AMLO.
En cuanto a la oposición; después de un sexenio tan adverso en el que la agenda pública fue dictada completamente por AMLO y compañía y los líderes de la oposición simplemente se limitaron a contrariar al presidente más popular en la historia reciente del país, luce improbable que en este proceso electoral logren ofrecerle al ciudadano mexicano algo que lo haga desistir de votar por MORENA.
Desde la propia designación de Xóchitl Gálvez como su precandidata, la coalición opositora no ha dado indicios de estar dispuesta a cambiar de paradigma, y por tanto, su éxito (cuando menos parcial) en el próximo proceso electoral recaerá en no cederle más terreno a la 4T e impedir que esta logre una mayoría absoluta en el congreso.
La oposición sabe que difícilmente en algún punto, Sheinbaum tendrá una popularidad equiparable al de AMLO y a partir de ahí, tal vez puedan consolidar en el siguiente sexenio un ejercicio de oposición mas exitoso que el actual y desarrollar un proyecto de nación atractivo para los mexicanos.