Rafael Castelán, director ejecutivo de la organización Servicios de Inclusión Integral (Seiinac), demandó la necesidad de mejorar las condiciones de vida de la población LGBTTTI Q, debido a que no hay una integración real en salud, educación, seguridad social y derechos sexuales y reproductivos.
De acuerdo con el Activista, en el país hay una población de 5 millones de personas que se identifican como parte de la población LGBTTTI Q, es decir una de cada 20 personas es parte de la diversidad sexo genérica. Sin embargo no cuentan con un acceso a sus derechos.
Refirió que de esta población, dos de cada 10 personas acuden a instituciones públicas de salud, por lo que es necesario promover la atención integral de la salud sexual y reproductiva en los servicios de salud, e incluir la prevención y tratamiento de infecciones de transmisión sexual (ITS).
También resaltó qué hay desafíos que deben atenderse para promover la inclusión en la educación, la seguridad sexual entre otros, ya que resaltó sigue la violencia y la discriminación en discursos de odio, que estigmatizan la vida de las personas de la diversidad sexo genérica.
Rafael Castelán indicó que el estado debe de proveer el acceso a estos derechos, así como también la protección a la participación política, sin que haya algún tipo de discriminación.
Una deuda que se ha tenido con esta comunidad, es la creación de un sistema de información estatal, sobre crímenes de odio y actos de discriminación, así como desagregar la información para visibilizar lo que ocurre.