Cruz Roja, delegación Tulancingo, cuenta con una plantilla de 25 paramédicos, que al año atienden alrededor de cuatro mil servicios, principalmente choques automovilísticos y percances que involucran a motociclistas.
Karem Ruiz Hurtado, presidenta del Patronato de Cruz Roja, informó lo anterior ayer (lunes) durante la celebración del “Día del Socorrista”, en la que destacó la importancia de la suma de esfuerzos y el manejo transparente de los recursos, ya que provienen de las colectas y aportaciones de empresarios.
Dio a conocer que la plantilla de la benemérita institución también está integrada por cinco enfermeras y 25 paramédicos.
Estos últimos, realizaron algunas actividades como parte de sus festejos; entre estas, la colocación de un arreglo floral justo donde el 18 de noviembre de 1983, socorristas sufrieron un accidente, en el que fallecieron dos elementos y un paciente.
Posteriormente tuvieron una comida y convivencia y por la noche se ofició una misa en la Iglesia de la Fe.
José Luis Juárez Flores, vocero de la Cruz Roja, relató el un trágico accidente que se recuerda cada año, en el Día del Socorrista.
El 18 de noviembre de 1983, a bordo de una ambulancia trasladaban a un paciente al Hospital General de Pachuca, cuando a la altura de Tizahuapan, una pesada unidad los sacó de la carretera y chocaron contra una barda.
En el lugar perecieron los socorristas, Rafael Márquez Robles, Héctor Cruz Amador y el paciente. Sobrevivieron, Ponciano Martínez Cabrera, Salvador Guevara Martínez y José Luis Juárez Flores.
Dos días después, se llevó a cabo el desfile de la Revolución Mexicana (20 de Noviembre) y aunque con tristeza reflejada en sus rostros, los socorristas hicieron todo el recorrido ante el aplauso de la gente y el ulular de las sirenas.