Tras varios reportes ciudadanos, turnados a la dirección de Reglamentos y Espectáculos de Tulancingo, en los que señalaban a un bar que no respetaba el horario establecido para su funcionamiento, al igual que a una tienda donde vendían micheladas, el fin de semana fueron clausurados.
De acuerdo con las denuncias, el bar ubicado en la esquina que forman las calles Sonora y Chihuahua, en la colonia Javier Rojo Gómez, recurrentemente cerraba a las cinco o seis de la mañana y durante la noche, tenía la música a alto volumen e impedía que los vecinos pudieran descansar.
Por ello, pidieron la intervención de la dirección de Reglamentos y tras una visita de verificación, los inspectores comprobaron que los reportes vecinales eran reales, pues encontraron el bar abierto en horarios no permitidos y con música a un volumen por arriba de los decibeles permitidos.
En cuanto a la tienda de la colonia Caltengo, la dependencia informó que los reportes advirtieron de la venta de bebidas llamadas “micheladas”, incluso a menores de edad, pese a que este establecimiento no cuenta con permiso para ello.
Personal de Reglamentos, acudió al lugar y comprobó los hechos, por lo que procedieron conforme a lo que estipula el Bando de Policía y Gobierno, en este caso la clausura de ambos establecimientos comerciales

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