La diputada de Morena, Lidia García Anaya, justificó la participación de las fuerzas armadas en labores de seguridad pública, ya que no se puede pacificar al país desde la guerra como lo intentaron gobiernos anteriores que fracasaron en su intento.
“Es decir que la participación de las fuerzas armadas en labores de combate a la delincuencia sea de manera extraordinaria, de forma que toda intervención resuelte excepcional, temporal y restringida, a lo estrictamente necesario ante las circunstancias que justifiquen su intervención”.
Manifestó que 121 mil personas asesinadas y 17 mil 210 personas desaparecidos del 2006 al 2012, constituye el testimonio más claro de lo que ha provocado la violencia y la inseguridad en el país.
Indicó la hidalguense que este gobierno trabaja con antecedentes adversos, “pero que no son nuestros, son de las administraciones anteriores”, por lo que es necesario que se siga trabajando por la pacificación de México.
Lamentó que no a todos los partidos políticos les importan los mexicanos, porque se han mantenido su postura en contra de que los militares sigan participando contra el crimen organizado hasta el 2028 y no entienden que su tarea solo es temporal.
“No quieren que se frene la violencia con métodos humanos y eficaces y no con más violencia”, expresó la morenista, quien justificó la estrategia del gobierno de “abrazos no balazos”.
Afirmó que Morena no ha reparado en aprobar todos los métodos que sean necesarios para garantizar la efectividad en la protección de los derechos humanos.
Sin embargo, García Anaya dijo que es necesario que el desempeño de las fuerzas armadas, se apegue a los términos planteados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos.
Además, subrayó que las labores de los militares, estarás supeditadas a las labores de seguridad. “Lo importante es que su actuación estará regulada mediante mecanismos de estricta fiscalización”
