Trabajadores del Colegio de Bachilleres del Estado de Hidalgo (COBAEH) acusaron al director general, Rubén López Valdés, de imponer una serie de medidas que consideran violatorias de sus derechos laborales, además de señalar que dichas acciones son inequitativas y se llevaron a cabo mediante un presunto sobreprecio.
Los empleados señalaron que sufren una confrontación con el funcionario, debido a su intención de implementar relojes digitales y dispositivos biométricos, para registrar entradas y salidas en los 132 planteles de la institución.
Indicaron que su principal inconformidad no es el uso de estos dispositivos, sino que las medidas no se aplican de manera equitativa.
También denunciaron que el costo de estos relojes presenta un sobreprecio. Además, acusaron que colaboradores cercanos al director general cuentan con privilegios en los horarios establecidos.
Por ello, exigieron una investigación, ya que consideran que no solo existe favoritismo en los horarios, sino también en la asignación de cargos. Asimismo, destacaron que han intentado entablar un diálogo con López Valdés, quien se ha negado a atender sus inquietudes.
Advirtieron que no aceptarán la implementación de los relojes biométricos hasta que se realice una revisión exhaustiva de la situación y se garanticen condiciones laborales justas.
Subrayaron que este tipo de acciones solo generan un entorno hostil para los trabajadores.
Finalmente, señalaron que, de no realizarse una investigación sobre estas irregularidades y atender sus quejas contra López Valdés, podrían tomar medidas más contundentes para exigir transparencia en su gestión y la garantía de sus derechos laborales.