El titular de la Oficialía Mayor de Hidalgo, Edgar Orlando Ángeles Pérez, aseveró que en seis meses de la actual administración estatal, el 80 por ciento de los contratos entregados se han efectuado vía licitación.
Del resto, el 12 por ciento de los procedimientos se llevaron a cabo por invitación a cuando menos tres personas y el 8 por ciento restante, realizados sin concurso, por adjudicación directa.
Cuestionado si la Oficialía Mayor tiene esquemas de vigilancia para evitar la simulación de competencia entre participantes en las licitaciones que lleva a cabo, el funcionario dijo que “está la contraloría interna” y está la Secretaría de la Contraloría, que forman parte del Comité de adquisiciones.
“Cualquier participante que pueda cumplir con lo que requiera la Oficialía Mayor puede participar”, expuso.
Negó que la centralización de las compras en servicios como gasolina, se preste a corrupción.
“Se están ocupando distintas gasolinerías, eso quiere decir que no solamente se lo está llevando una sola gasolinería, sino se llevan varias”, expuso.
Sostuvo que los rubros a los que se destinan más recursos para compras centralizadas, son la compra de combustible, materiales de oficina y papelería.
Aseveró que con ello se pretende reducir los costos y que el gobierno gaste solo en lo que requiere.
“Anteriormente se compraba por comprar, hoy se compra lo que realmente requiere el gobierno, porque todas las partidas centralizadas se están haciendo a través de una licitación abierta, el cual, de acuerdo como lo vaya ocupando el gobierno, lo va solicitando y lo va a pagar”, dijo.
Si “al final del día” no se ocupó todo el recurso, el dinero se regresa a las arcas del gobierno y se puede ocupar para otra compra, expresó.
En el caso de la adquisición de uniformes y útiles escolares para el siguiente ciclo escolar, Ángeles Pérez adelantó que se llevará a cabo a través de la Oficialía Mayor “para transparentarlo”