Comerciantes que se encuentran en las inmediaciones del Centro Cultural Ricardo Garibay, advirtieron de la presencia de un menor que vende dulces o pide dinero a los transeúntes, quien se muestra asustado y nervioso cuando le preguntan por sus padres.
Rubén Fernández, uno de los denunciantes, comentó que ya establecieron contacto con la mamá del niño, quien se comporta de una manera muy agresiva y responde con palabras altisonantes.
La directora de la Unidad de Primer Contacto, dependiente del Sistema DIF Tulancingo, Yolanda Veytia, informó que junto con personal de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), Reglamentos y de la Subprocuraduría de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, tienen detectados a al menos seis menores de edad, que venden flores o chocolates.
“Como Sistema DIF, lo que hacemos es invitar a los padres para que se lleven a los niños, les hacemos ver que los menores no pueden realizar esas actividades por los riesgos a los que se exponen. Nos hemos topado con situaciones adversas, incluso nos han querido hasta golpear”.
La entrevistada, agregó que algunos niños que piden dinero o venden diversos artículos, no son de Tulancingo, sino que vienen de Cuautepec de Hinojosa, por lo que enviaron oficios a las autoridades del municipio vecinos, para ponerlos al tanto de estos casos y que les den seguimiento.
“Durante las tardes, es cuando más se pueden apreciar estos casos, porque seguramente los papás saben que a esas horas el personal de las dependencias ya no se encuentran laborando; sin embargo, se cambiarán las estrategias para evitar este tipo de prácticas”, advirtió Yolanda Veytia