“Nos mandan hasta Tlaxcala para que un cardiólogo atienda a mi mamá, porque en la Clínica 34 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) no hay y es un caso de urgencia”, denunció Marcela Galván, quien refirió que desde hace dos meses llevó a su madre a este nosocomio, pero en varias ocasiones tuvieron que regresarse sin que la atendieran.
“Después nos dijeron que no había cardiólogo y fue cuando nos dijeron que el único lugar donde podían darle la consulta era en el Hospital General de Zona 1, en Tlaxcala”.
“Si nos vamos en autobús, son casi cuatro horas en llegar y luego buscar donde está la clínica, es mucho el desgaste, mi mamá no está en condiciones de viajar, además el servicio de transporte es muy deficiente, se supone que la Clínica 34 de Tulancingo, es una de las mejores del estado de Hidalgo.
Derechohabientes del IMSS externaron su molestia, debido a que les difieren sus consultas médicas ante la falta de médicos especialistas, principalmente de las especialidades de Ginecología y Cardiología.
Rosa Vargas Vera, narró que a su mamá le tienen que realizar estudios para conocer el estado en que se encuentra su matriz, pero como la Clínica 34 del IMSS no cuenta con ginecólogo, la mandaron hasta Ciudad Sahagún.
“Las carreteras están muy feas y mi mamá se cansa mucho, le tienen que hacer varios estudios y no es justo, el Seguro Social no es gratuito, pues nos lo descuentan de nuestros salarios y todo lo que dicen los políticos que estamos bien en salud, es pura mentira”, recriminó.
Leticia Franco, comentó que la tarde del lunes llevó a su papá a la citada clínica porque tenía programada una consulta.
“Salimos a las siete de la noche, hacía frío y a mi papá le cuesta trabajo caminar, por lo que tiene que usar andadera. Al llegar, para solicitar la próxima consulta, la encargada del consultorio no se la quiso programar porque ya no era horario de atención.”
La entrevistada, dijo que muchos trabajadores y trabajadoras del IMSS, se comportan de manera déspota y carecen de sensibilidad.
