Tras el reporte turnado al Sistema DIF Tulancingo por vecinos de la colonia El Mirador, quienes advirtieron que en esa demarcación se encontraba un adolescente en situación de maltrato por parte de sus familiares, personal del organismo asistencial, tras una visita domiciliaria, descartó dicho señalamiento.
Los denunciantes, aseguraban que el adolescente, de 16 años de edad, era obligado a estar en la azotea de su domicilio, sin comer y desde ahí, insultaba y arrojaba piedras a los peatones que pasaban por su vivienda, incluso mencionaron que ya había provocado un accidente vehicular entre una colectiva y un automóvil particular.
El DIF, a través de la Unidad de Primer Contacto, acudió el pasado 2 de julio al domicilio reportado y previo a la entrevista con los padres de familia, preguntaron a algunos vecinos, quienes mencionaron que durante el tiempo que llevaban de conocer a familia del menor, no se habían enterado de algún percance.
Al arribar al domicilio, los padres del menor recibieron a la trabajadora social y le permitieron entrar a la vivienda, donde refirieron que su hijo es autista y presenta un ligero retraso mental.
Los padres del adolescente, comentaron a la enviada del DIF Tulancingo, que su hijo disfruta mucho estar en la azotea, incluso refieren que para él es un lugar de tranquilidad y todos los días pasa mucho tiempo ahí jugando.
Derivado del autismo, el menor tiende a gritar o a hablar en tono alto, acción que no pueden controlar y eso ha molestado a dos vecinas, quienes no entienden que eso es parte de la enfermedad del adolescente.
El menor, informó el DIF Tulancingo, toma clases virtuales en el CAM 5, sabe leer y escribir, incluso el viernes 2 de julio fue su clausura y les mostraron fotos a la trabajadora social, quien manifestó que en todo el tiempo que estuvo el adolescente hablaba con voz fuerte, caminaba descalzo, subía a la azotea y se notaba que eso lo hacía sentir bien.
Finalmente, el DIF informó que el aspecto de alineación del adolescente, el personal del DIF lo catalogó como bueno, estaba limpio, no se observaron señal de algún maltrato o riesgo hacia él. Observaron un chico sano que come tres veces al día, con alimentación a base de fruta, verdura y carne, cubriendo las necesidades básicas, además de que con sus padres muestra cariño, los abraza y los besa