El Departamento de Justicia de EE.UU. y 16 fiscales generales estatales demandaron a Apple este jueves ante un tribunal federal de Nueva Jersey por crear un monopolio y obstaculizar a los competidores. La demanda se dirige contra el producto más popular y lucrativo de la empresa, el iPhone.
En el documento se afirma que Apple impuso “una serie de normas y restricciones cambiantes” para “extraer tarifas más altas, frustrar la innovación, ofrecer una experiencia de usuario menos segura o degradada y estrangular las alternativas competitivas”.
Debido a esta conducta, el Gobierno y los estados alegan en la demanda que Apple “construyó y reforzó un ‘foso’ alrededor de su monopolio de teléfonos inteligentes”.
“Si no se cuestiona, Apple seguirá utilizando y reforzando su monopolio de los teléfonos inteligentes para dictar cómo las empresas pueden crear y distribuir aplicaciones en el futuro, de modo que no puedan amenazar los monopolios de los teléfonos inteligentes de Apple”, señala el documento.
El portavoz de Apple, Fred Sainz, ha declarado en un comunicado que “esta demanda es errónea desde el punto de vista de los hechos y de la ley”. Según él, la demanda “amenaza lo que somos y los principios que distinguen a los productos de Apple en mercados ferozmente competitivos”.
En febrero, se informó que la Unión Europea multaría a Apple con 500 millones de euros (539 millones de dólares) por favorecer su propio servicio de música en ‘streaming’ frente a rivales como Spotify.
ACT