Hace unos días se dio la noticia de la muerte de una persona en un restaurante en la Ciudad de México dado que, había tenido un altercado primero con el Valet Parking de dicho restaurante y posteriormente con los meseros al intentarle cobrar una propina del 50% y al negarse genero un altercado que culmino con la muerte de una persona.
Ahora bien, el acto no solamente debe de ser condenado por la sociedad sino debe de servir como una reflexión.
En primer punto, la autoridad debe de realizar una investigación minuciosa respecto de las personas que participaron en el hecho y la autoridad jurisdiccional deberá resolver conforme a derecho la existencia o no de un delito.
En segundo punto, me parece que es necesario señalar que bajo ninguna circunstancia ningún establecimiento puede permitir que sus trabajadores golpeen o agradan de ninguna forma a los clientes.
En tal sentido, me ha parecido acertada la suspensión impuesta al restaurante y considero que como empresa debe de ser investigada con la finalidad de establecer si existe o no una responsabilidad que pueda dar como consecuencia incluso la clausura definitiva del recinto.
De la misma forma, me parece importante hacer hincapié no solo en que las propinas no son obligatorias, sino que los meseros ni los trabajadores de ningún establecimiento son quienes para hacer ningún tipo de justicia ni este ni en ningún tipo de establecimiento.
En ese mismo sentido, los trabajadores no somos autoridad ni tenemos un rango superior a aquel de los consumidores y debemos de ser garantes de los derechos de los demás.
Sin duda este condenable incidente debe de ser recordado por la sociedad y en especial por los prestadores de servicios para crear dentro de los establecimientos los protocolos necesarios para prevenir cualquier incidente y garantizar la seguridad y los derechos de todas las personas.
Lic. Juan Fernando González Espinosa
juanfer_lm@jfg