Por Arturo Hernández Cordero

En noviembre próximo, se estarán celebrando las elecciones presidenciales en Estados Unidos tras cuatro inestables años de administración demócrata liderada por el aún Presidente Joe Biden.
No obstante, un viejo conocido en la política global vuelve a aparecer como eventual candidato republicano y claro favorito a ocupar la oficina oval de la Casa Blanca de nueva cuenta: el magnate y ex presidente Donald J. Trump; pese a los múltiples obstáculos legales que el oficialismo le ha impuesto y los liderazgos surgidos durante los últimos años dentro del propio partido republicano.
Y es que con el reciente triunfo obtenido en las primarias de New Hampshire, Donald Trump ha dejado ver que su popularidad entre los simpatizantes republicanos y toda la fracción conservadora de la política estadounidense sigue siendo enorme.
Si bien, el gobernador de Florida, Ron DeSantis y la diplomática Nikki Haley habían adquirido una influencia considerable dentro del Partido Republicano, lo cierto es que Trump se ha impuesto con suficiencia y desde ya, se puede augurar que estará en las boletas el próximo 5 de noviembre.
Por su parte, el Presidente Joe Biden estará buscando la reelección y el Partido Demócrata ya está llevando acabo ajustes internos para su proceso de campaña; sin embargo, la pérdida de poder de Estados Unidos en el panorama internacional durante la administración Biden, la lenta recuperación económica post pandemia, la crisis del fentanilo y el paupérrimo control migratorio, han propiciado índices de popularidad demasiado bajos para la gestión demócrata.
En 2020, Biden llegó a la casa blanca en medio de la incertidumbre generada por la pandemia y el auge del progresismo en E.E.U.U., pero tras casi cuatro, el fracaso de las políticas demócratas y el declive de los ideales progresistas, le han permitido a Donald Trump resurgir con fuerza en la política estadounidense, dada la necesidad de un liderazgo fuerte que otorgue a los Estados Unidos certidumbre geopolítica y estabilidad económica y social, tal como lo hiciera en el periodo 2016-2020.

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