El uso irresponsable de las redes sociales puede generar fatalidades

Las imágenes de un hombre que fue quemado vivo en el municipio Huauchinango, Puebla, las cuáles han dado la vuelta al mundo, son estremecedoras, reflejan la ignorancia y manipulación de la que fueron objeto algunos pobladores a través de las redes sociales y solo porque lo vieron sospechoso, la turba actuó de manera insensible.
Fue un linchamiento, es decir, una ejecución sin que hubiera algún motivo de por medio, en un pueblo de aproximadamente 200 habitantes bastó un grupo de por lo menos 30 personas enardecidas, que actuaron sin razón alguna, con extrema violencia.
Este no es un caso aislado, pues en la región Tulancingo, se han suscitado hechos similares, que nada tienen que ver con los usos y costumbres, como algunos lugareños aducen y aunque no hay justificación, ya que forman parte de la ilegalidad, a diferencia de lo recién ocurrido en Puebla, en su mayoría han tenido que ver con intentos de robos o extorciones.
En Tulancingo, específicamente en Santa María Asunción, en lo que va del año, se han suscitado por lo menos dos intentos de linchamientos, en uno de estos el pasado 18 de abril, un varón perdió la vida, presuntamente por entrar a una casa a robar.
Sobre aquellos mensajes que llegan vía WhatsApp o Facebook, José Islas Martínez, titular de la Unidad de Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), dijo que el poder que actualmente tienen las redes sociales, es inmenso.
“La velocidad con la cual se distribuye una información, un audio o un texto, sin corroborar este tipo de datos, puede ser muy perjudicial. En Hidalgo, se empiezan a registrar situaciones similares; se tienen supuestos reportes de una camioneta blanca con personas sospechosas, lo que genera zozobra y temor, por lo que cuando en realidad ven algún vehículo con estas características, se origina pánico entre la población”.
Islas Martínez, instó a los usuarios de las redes a que antes de hacer una difusión de este tipo de mensajes, verifiquen de dónde viene la información. “Puede ser, el amigo, el vecino o el compañero de trabajo quien los envía, pero preguntarles a ellos de dónde o cómo les llegó o quien se los envió”.
El linchamiento, es la ejecución, sin que medie un proceso legal, de alguien sospechoso o presumiblemente culpable de un delito por parte de un grupo de personas, haciendo uso de la violencia física. Por lo general, ocurre de manera espontánea y en él participa una multitud de personas