Es verdad que llevamos casi un mes sumergidos en la estación de verano, pero creo que muchos no lo hemos disfrutado realmente como se debe. Es decir, tuvimos días bastante calurosos las pasadas semanas y en el ambiente aún se percibe mucha energía, pero seguimos en clases y seguimos trabajando. No bikini y no bronceado.
Si bien restan un par de semanas para culminar el ciclo escolar oficial, es el momento para profundizar que un verano sin vacaciones, no se disfruta igual. Es por eso por lo que me pregunto, ¿ustedes ya planearon sus vacaciones? ¿Qué lugar visitarán en esta ocasión?
La semana pasada, por ejemplo, recibí un mensaje de mi amigo Iván acompañado de un video, donde se le ve paseando en un bote, muy sonriente, disfrutando del sol, de la compañía de su esposa, cuñada y más gente que no logré identificar.
Ahí me di cuenta de que hay personas que sí están disfrutando de su verano, ¡y qué manera de hacerlo! Además, los franceses se toman muy en serio la parte de las vacaciones y mi amigo, siendo mexicano, ha adoptado las buenas costumbres de la France. ¡Por eso y más, te extraño París!
El video que me envió, fue muy sorpresivo y agradable. De entrada, mi amigo no es mucho de compartir cosas por las redes sociales, pero en privado es particularmente increíble, así que podrán imaginar que su vida está llena de buena vibra y concretamente, a pesar de los 9,050 km de distancia y las 7 horas de diferencia que hay entre nosotros, seguimos disfrutando de ponernos al día y seguir en contacto.
De los sueños más grandes que tiene Iván, es el comprarse un bote y recorrer Francia y Europa con toda tranquilidad. De hecho, cada que teníamos oportunidad nos acercábamos al río Sena y disfrutábamos ver los botes pasar, lo mismo sucedía en las orillas del “Parc de la Villette” y el “Canal Saint-Martin”. Y aunque el panorama suena muy hermoso, la realidad es que todas esas aguas están sucias, y si te llegas a caer, ¿qué podría pasar?
Bueno, durante mis años de vida parisina, Iván nadó por esas aguas en dos ocasiones; la primera fue un accidente y de la cual desafortunadamente aún no tengo permiso para contar, y la segunda fue en los días de la canícula, en las protegidas playas de “Paris plage”.
Nadar en las aguas de la capital francesa está prohibido desde 1923, pero desde el 2002 se tiene la iniciativa del ayuntamiento con “Paris plage”, dónde cada verano se disfruta de las actividades costeras a las orillas del río Sena, “La Villette” y el canal; con arena, palmeras, terrazas y más. Este año se disfruta del ambiente playero en la ciudad desde 8 de julio hasta el 3 de septiembre (justo el día de cumpleaños de Alexandre, no lo olviden).
No obstante, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, anunció el domingo pasado que a partir del 2025, será posible nadar nuevamente en el río Sena de manera segura. Se sabe que esto es un proyecto pensado desde hace muchos años, pero que no se había concretado hasta ahora con los juegos olímpicos en puerta y las grandes inversiones en los alcantarillados y en la modernización para el tratamiento de las aguas residuales. La ciudad de París cada día se vuelve más interesante.
Con estas noticias, posiblemente pueda visitar a mi amigo y si se nos atraviesa un nuevo verano en la ciudad, tener listos los trajes de baño para nadar.
