A casi un año de que los comerciantes de productos no perecederos del Tradicional Tianguis de los Jueves, fueron obligados a suspender actividades por las medidas sanitarias derivadas de la pandemia por Covid-19, reconocen que pasan por una situación difícil, la cual los orilló a incursionar en las ventas en línea, pero piden volver a trabajar en sus lugares habituales.
Román Rodríguez, comerciante de artículos de papelería y juguete, comentó que esta pandemia se ha llevado los ahorros que había podido generar antes de la misma, pues fue relegado de todos los tianguis por no vender artículos perecederos; sin embargo, agradece que tiene salud y espera que las autoridades puedan dar apertura a los productos no esenciales, aunque sea de manera intermitente, en los tianguis.
Claudia García, comerciante de mandiles y artículos de temporada, enfrenta el mismo problema que su compañero Román y tuvo que incursionar en las ventas a través de Facebook, situación que le permitió mantener al menos 25 por ciento de sus ingresos.
Samuel Cruz Flores, dirigente de los tianguistas, informó que la agrupación cuenta con aproximadamente 800 comerciantes agremiados, de los cuales, al menos 200 se dedican a la venta de productos no esenciales, situación que lo llevó a insistir con las autoridades para que les permitieran trabajar de manera parcial, como lo están haciendo ahora.
Explicó que el gobierno municipal autorizó que entre 20 y 25 comerciantes, expendieran productos no perecederos y de esta manera los va rolando, para que al menos tengan un ingreso mínimo.
Reconoció que pese a lo difícil de la situación, los aproximadamente 200 comerciantes de productos no perecederos, mantienen ese giro porque aunque existía la posibilidad de que se cambiaran a productos perecederos, las restricciones del aforo de 30 por ciento harían muy difícil su trabajo continuo.
Descartó que algunos de sus agremiados hayan dejado el comercio para enrolarse en una empresa, ya que la situación es difícil en todos los ámbitos y el comercio, es una actividad que han llevado desde siempre e incursionado en las ventas en línea o “rancheando” su mercancía, para poder subsistir