En sesión solemne, el Congreso del Estado de Hidalgo, entregó la presea “Pedro María Anaya” 2021, a Martina Cruz García, quien se ha destacado por sus aportaciones a la preservación y difusión del arte y tradiciones del estado, a través de su meritoria labor como tejedora ñahñu.
Martina nació el 24 de febrero de 1941 en la comunidad de El Mejay. Vivió su niñez, en el Valle del Mezquital, con responsabilidades de adulto, al apoyar a su madre en los quehaceres domésticos y en las actividades de campo, como el pastoreo.
Martina se encontró con el telar de cintura, a los 12 años. Margarita Hernández, una comisionada por el Patrimonio Indígena del Valle del Mezquital, llegó a la comunidad para enseñar a las mujeres diferentes oficios. Martina aprendió a urdir, preparar el telar y a tejer hermosas figuras. Así fue como Martina conoció el telar de cintura.
Pronto Martina enfocó su atención al telar de cintura, que ya no dejó un solo momento. Y es que tejió al principio por curiosidad, luego como diversión y pasatiempo.
Ha recibido reconocimientos y premios. El más apreciado por ella, es el reconocimiento que le otorgó de la Fundación Banamex, con un espacio en el libro “Grandes Maestros del Arte Popular Mexicano”. También por supuesto, los primeros lugares en el Gran Premio de Arte Popular.
Ha representado al Estado de Hidalgo a nivel nacional e internacional. En agosto del año 2014, fue una de los tres artesanos que el gobernador Francisco Olvera eligió para que lo acompañaran a la Ciudad del Vaticano, como parte de una campaña para promocionar y posicionar turísticamente al Estado de Hidalgo a nivel internacional.
Desde hace más de 60 años la Sra. Martina ha preservado esta tradición lo que le ha merecido múltiples premios nacionales. La finura y belleza de las artesanías; la perseverancia, dedicación y entrega le han valido a Martina las mayores satisfacciones y experiencias de su vida.