¿En qué país vivimos que la alimentación no sea prioritaria para su población? ¿Qué gobiernos tenemos? a los qué no les ha importado el campo, ni los campesinos, ni la autosuficiencia alimentaria.
Desde hace 40 años que el campo de la región de Tulancingo está en el abandono, gran parte erosionado y otro invadido por la mancha urbana gris y desordenada. Es terrible observar que las tierras de cultivo han desaparecido en los alrededores de Cuautepec, Santiago y Tulancingo. En otros como Acatlán y Huasca el mal empieza.
Antes del tratado económico (TLCAN) ya los gobiernos importaban alimentos del extranjero dando muerte a la pequeña producción agrícola y favoreciendo a los grandes productores industriales.
Y la tierra también desaparece, distintos factores la hacen improductiva como son; el aire, la lluvia y actividades humanas:
“La erosión o degradación de los suelos es la pérdida del mismo, principalmente por factores, como las corrientes de agua y aire, en particular en terrenos secos y sin vegetación además del hielo y otros elementos. La erosión del suelo reduce su fertilidad porqué provoca la pérdida de minerales y materia “ Eco red.
La degradación del suelo, a consecuencia de la erosión, afecta la fertilidad del suelo y en última instancia la producción de los cultivos.
Con frecuencia, el resultado de la deforestación es la erosión del suelo. Cuando no hay árboles cubriendo el suelo la lluvia golpea directamente el suelo en lugar de gotear gradualmente desde las ramas y caer suavemente sobre el piso forestal. Esto significa que cuando llueve, más agua golpea más fuertemente el suelo, arrastrándolo. Sobre el suelo de la mayoría de los bosques, hay una capa de material orgánico, como hojas en descomposición y madera que absorbe el agua, la lluvia puede ser absorbida por esta capa en lugar de escurrirse sobre el suelo.
Las consecuencias no se dejan esperar, menos agua en los lugares deforestados, grandes tolvaneras que afectan la salud, de los seres humanos y animales. Una extensa erosión puede provocar deslizamientos de terrenos, muchos de estos deslizamientos empiezan en las laderas desnudas o en la parte inferior de caminos madereros inclinados, El agua se acumula en estas áreas y este flujo concentrado empieza arrastrar el suelo.
Otras amenazas para los suelos, el campo, los bosques, montañas y otro tipo de suelos son: la venta que se ha hecho del territorio mexicano para la explotación; minera, petrolera y los cultivos genéticamente modificados o transgénicos:
Como plan nacional de desarrollo la próxima reforma agraria pretende incluir la siembra de semillas genéticamente modificadas. Como respuesta Manuel Bravo, director de Monsanto Latinoamérica, tiene la esperanza que una vez resueltos los problemas legales que enfrentan en los tribunales, la compañía podrá realizar negocios de larga duración con el gobierno federal.
Esto significa que los campesinos mexicanos serían dependientes de esas semillas que solamente sirven para un solo cultivo y Monsanto y Bayer tendrían el monopolio.
El problema del maíz transgénico es la tolerancia al herbicida glifosfato el cual produce sustancias tóxicas resistente al ataque de ciertos insectos. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud -OMS- el glifosfato es una sustancia catalogada como cancerígeno el cual dispersa y alcanza cultivos ecosistemas y cuerpos de agua superficiales y subterráneos.
Aún con los cambios y el crecimiento desmedido de la mancha urbana debemos rescatar las pocas áreas verdes en este valle de Tulancingo y así evitar la erosión. Hasta el próximo viernes.