La Suprema Corte de Justicia de la Nación se prepara para debatir en estos días, 8 reformas que fueron aprobadas de manera exprés en el Congreso de la Unión, incluso se menciona que no hubo ni tiempo de estudiarlas.
En tal sentido, la Suprema Corte estudiará el proceso legislativo y sin la falta de dichos procesos puede llevar incluso a la invalidez de dichas normas y del proceso mismo.
Existen voces que sostienen que tal y como ciertos criterios parlamentarios establecieron hace años, todo proceso legislativo se purga al momento de ser votado por mayoría, dando pie a la posibilidad de generar procesos legislativos contrarios a la norma y ser convalidados en el seno del parlamento.
Incluso es de mencionar que quien fuera ministro, ha señalado su extrañeza por esta nueva tendencia a estudiar e invalidar procesos, por falta de forma legislativa contrario a lo que denomino otros tiempos.
Ante ello es de considerar que de ser cierto esta situación, parece que es un acto digno de aplauso puesto que hoy se estudia mucho mas un proceso que debe de ser transparente y legal en todo sentido.
Lo anterior no implica invalidar normas por invalidar, sino por el contrario garantizar la democracia de nuestra nación en la máxima tribunal nacional, que es el Congreso donde esas formalidades implican escuchar a todas las voces y con ello, también a las minorías que poco a poco, intentan ser acalladas pero el derecho de ser escuchadas en la esencia de una democracia.
Alegra que hayamos comenzado una nueva etapa que garantice la democratización de nuestra institución parlamentaria, que transparente las decisiones y que invite a la sociedad a ser partícipe de la misma. Claro antes no se hacía, cuando teníamos una democracia incipiente y débil. Hoy se debe de hacer para garantizar la participación de toda la sociedad y con ello nuestros derechos.
juanfer_lm@jfg