Por Arturo Hernández Cordero
En el año 2021, el entonces presidente haitiano Jovenel Moïse, fue asesinado por mercenarios contratados por pandillas del crimen organizado, que controlan la vida pública en Haití desde hace décadas.
Tras dicho suceso, el primer ministro Ariel Henry asumiría el gobierno del país caribeño; no obstante, la crisis política, económica y humanitaria permanente que han definido la totalidad de la historia haitiana, se han agudizado a partir de dicho suceso y el poder de las pandillas ha incrementado en demasía.
Tras un viaje a Kenia por parte del primer ministro Henry, en busca de ayuda del gobierno de la nación africana, los grupos criminales bajo el mando del líder pandillero Jimmy Chérizier, se hicieron con el control del país y obligaron a dimitir al primer ministro el pasado martes 12 de marzo.
Ahora, Haití se encuentra en una situación de vacío de poder que se suman a la pobreza y violencia extremas que hacen el país más convulso del continente americano, pero ¿qué es lo que ha puesto a Haití en tan grave situación que año con año lleva a miles de haitianos a abandonar su país?
Pues bien, desde su independencia de Francia en 1804, el destino de Haití estaba prácticamente sentenciado a la miseria y la inestabilidad. Aunque la independencia de Haití, supuso la primera rebelión de esclavos exitosa en la historia, las masacres en contra de las minorías blanca y mulata que ocurrieron posteriormente, excluyeron a Haití del comercio internacional; además de tener que pagar a Francia una cuantiosa indemnización por las perdidas ocurridas durante su independencia.
Aunado a ello, la posición geográfica de Haití le ha jugado en contra, haciéndolo proclive a sufrir desastres naturales como el terremoto que lo devastó en 2010, que a su vez generó una gran entrada de ayuda alimentaria al país que terminaría por arruinar la economía de los campesinos haitianos y orillarlos a actividades criminales.
A día de hoy, Haití precisa de una intervención extranjera que restablezca el gobierno y las instituciones; puesto que el éxodo de los ciudadanos haitianos está ocasionando una crisis migratoria a gran escala en el continente.