Luego del enfrentamiento en la planta de la Cooperativa Cruz Azul de Tula ocurrido el 27 de abril, que dejó ocho personas fallecidas, el subsecretario de Seguridad Pública del gobierno de México, Ricardo Mejía Berdeja, dijo que la federación participa en las investigaciones del caso, para aumentar los procesos penales.
“Estamos participando en las indagatorias para poder extender estas investigaciones y poder generar otros procesos penales, y nosotros podríamos, si nos lo instruye el presidente, presentar un reporte más amplio (…) No habrá impunidad en este caso”, sostuvo durante la conferencia mañanera de ayer.
De acuerdo con el funcionario, preguntarán a las autoridades estatales si existe alguna carpeta de investigación por alteración de la escena del crimen, debido a que de los cuerpos encontrados afuera de la planta, se hallaban apilados.
Hasta el momento, no hay necesidad de que la Guardia Nacional (GN) intervenga en el municipio, donde ocurrió la confrontación que dejó ocho personas muertas, lesionados, daños en la empresa y a vehículos, consideró.
Recordó que los primeros respondientes por la irrupción de un grupo de entre 150 y 200 personas, provenientes principalmente del Estado de México, fue la policía municipal y la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH).
“La Guarda Nacional solo actúa cuando se agota esta situación y evidentemente una vez que pasa al parecer del Gabinete de Seguridad, pero al momento no ha habido esta necesidad”, mencionó.
Por el caso, el 4 de mayo diez personas fueron vinculadas a proceso por los delitos de homicidio y lesiones en riña, así como por daños en propiedad. Un juez de control les dictó prisión preventiva y otorgó seis meses para el cierre de la investigación complementaria.
El subsecretario reiteró que la confrontación en Cruz Azul parte “del diferendo” de dos grupos que pelean por el control de la cementera, situación que “ha ido escalando”, dijo