Sillones, sillas, refrigeradores, lavadoras y material pétreo, se pueden apreciar en el centro y periferias de Tulancingo.
Fabián Aguilar, comerciante de la calle Morelos, dijo que tiene más de dos semanas que trabajadores de la construcción dejaron bolsas llenas de piedras en la banqueta y además de que no puede pasar la gente, generan contaminación.
A unos metros de estas piedras, apareció un sillón, lo que ha provocado molestia entre los vecinos de la cuadra que se encuentra a la altura de la Central de Abasto PIFSAL.
Otro caso fue reportado por habitantes de Huapalcalco, específicamente de la calle Cuauhtémoc, donde aparte de un reposet, también hay llantas en la vía pública.
El titular de la dirección de Limpia y Desechos Sólidos, Roberto Ballesteros, explicó que el personal del camión recolector no recoge ese tipo de material, ya que daña las láminas y los gatos hidráulicos del compactador.
Sin embargo, el funcionario agregó que este tema va más allá de los desperfectos que pudieran generar a las unidades, ya que estas acciones se convierten en problemas de contaminación ambiental y por lo tanto en “focos de infección”.
“Además, los muebles que la gente tira en forma irresponsable, en épocas de lluvias ocasionan taponamientos en las alcantarillas y por lo tanto, los encharcamientos afectan a varias colonias de la ciudad”.
Locatarios de la calle 21 de Marzo, así como peatones que transitan sobre esta arteria, a la altura de Primero de Mayo y Callejón Reforma, prácticamente en el primer cuadro de la ciudad, expresaron su queja ante Ruta, ya que en las afueras del mercado Hidalgo, propietarios de algunas carnicerías, dejan los desperdicios en la vía pública, en tanto los perros se encargan de desperdigarlos.
Los quejosos agregaron que es una irresponsabilidad por parte de estas personas, ya que no esperan a que pase el camión recolector de basura.
De igual manera -manifestaron-, que también tiran vísceras y otro tipo de desechos, que generan malos olores y también que se tapen las alcantarillas.
Agregaron que el piso se vuelve resbaloso por el sebo y hay personas que han sufrido caídas, con lesiones severas
Insisten vecinos en dejar en la calle sillones y todo tipo de desechos
