En diferentes tramos de la carretera federal, principalmente a la altura de San Alejo, jurisdicción Tulancingo, se puede apreciar a un importante número de vendedores, que incluso ocupan señalamientos y la barra de contención para exponer sus productos.
También, se observan puestos de comida o venta de frutas, a escasos metros de la cinta asfáltica, al margen del derecho de vía, que son 20 metros para ambos lados, tomando como referencia la raya de en medio de la carretera; tal como lo establece el Reglamento para estos efectos que regula la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, en su artículo 1.
Sobre este tema, Ascensión Gayosso, sobrestante que depende de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), indicó que parte de este desorden, es que el personal de la dirección de Reglamentos lo ha tolerado, tan es así que cobra a los ambulantes por trabajar en este sector.
“Los reubican, al pagar los comerciantes informales argumentan que cuentan con el respaldo de las autoridades y además nos han dicho que tramitaron un amparo y que nadie los puede remover”.
El entrevistado, indicó que a quienes colocan sus artículos de venta en las barras de contención o en los señalamientos, personal a su cargo los invita a retirarse, pero surgen conflictos y hasta agresiones.
Propietarios de comercios establecidos, comentaron que estos sectores se han vuelto parte de una gran anarquía y desorganización, lo que ha causado conflictos con los ambulantes.
Consideran que es una competencia desleal, por lo que las autoridades deben poner mucha atención y tomar cartas en el asunto, antes de que se originen enfrentamientos como ya han ocurrido en años anteriores.
De igual manera, responsabilizaron a Patricia Pichardo, encargada del área de Conservación de Carreteras de la SCT, ya que este problema ha prevalecido durante muchos años, en los que ha mostrado negligencia para resolverlo

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