Pese a que la semana pasada en Tulancingo, de acuerdo con la tabla epidemiológica, no hubo contagios por Covid-19, el dato más reciente indica que este fin de semana surgieron dos nuevos casos, aunque es una cifra mínima respecto a las del inicio del año por la variante Ómicron.
De igual manera, el número de defunciones se mantiene estático desde mediados de marzo, con 599 decesos.
Si bien, es evidente el proceso de desaceleración, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún no declara la culminación de la pandemia.
Según el Comité Jurisdiccional de Salud, no se descartan nuevos casos; sin embargo, se hizo énfasis de que no tendrán la magnitud ni el riesgo de cómo se presentaban el año anterior o hace dos años, cuando aún no había vacunas.
El 9 de mayo del año pasado, las autoridades anunciaban que Tulancingo pasaba a semáforo amarillo, pero meses después debido a la tercera oleada, la Secretaría de Salud regresó al municipio a color rojo.
Paralelamente a estas fechas, los adultos mayores y los grupos etarios de 50 a 59 y 30 a 40, ya habían recibido su primera dosis de vacuna, aunque los efectos del Sars-CoV-2 todavía eran letales.
El 10 de mayo de 2020, la situación era mucho más incierta porque apenas se reportaban 24 casos positivos, la tendencia al alza era a una gran velocidad, con cifras muy volátiles de un día para otro. Horas antes, se reportaba el segundo deceso, en un lapso de siete días
