Desde principios de la semana pasada, se ha instalado en la Ciudad Universitaria de la UNAM, un campamento estudiantil en protesta por los crímenes de guerra cometidos por el Estado de Israel en contra de Palestina.
A pesar de que oficialmente la UNAM no ha suspendido clases, gran parte del alumnado de varias licenciaturas, se encuentra protestando en el campamento pro Palestina y solicitando (como viene siendo costumbre en cualquier acto protesta por parte de estudiantes de la UNAM), “contribuciones voluntarias”, víveres, electrodomésticos y demás comodidades, para llevar a cabo su campamento, que entre otras consignas, exhorta al Gobierno de México a romper relaciones con el Estado de Israel.
Si bien, el férreo apego de la gran mayoría del alumnado de la UNAM a los ideales de la izquierda, les impide reconocer los actos terroristas perpetrados por fundamentalistas islámicos de Palestina, y además, valerse de preceptos antisemitas para condenar a Israel, lo que desconcierta de esta protesta en específico, es el carácter globalista de la misma, pues no se le ha visto a la UNAM en mucho tiempo, llevar a cabo protesta alguna en contra de la situación de impunidad, violencia extrema y perdida del Estado de Derecho, propiciados por el crimen organizado en México y la falta de una estrategia efectiva, por parte del Gobierno para lidiar con la situación.
La UNAM, desde hace ya varias décadas, ha dejado de ser una Institución que visibilice, proteste o contribuya a resolver las problemáticas que aquejan al pueblo mexicano.
En cambio, su alumnado abraza al día de hoy, el más absoluto globalismo, abanderándose de cualquier causa progresista a nivel internacional y en muchas ocasiones, de realidades completamente ajenas al país.
El Presidente de la República ha insistido en que existe una tendencia conservadora en la UNAM en los últimos tiempos, diagnóstico completamente errado, puesto que tanto estudiantes como catedráticos de la que alguna vez fuera la máxima casa de estudios a nivel nacional, han cedido a la agenda globalista y perdido su identidad académica en el proceso.