En Tulancingo, la semana pasada sumaron entre uno y dos contagios de Covid-19; sin embargo, ayer (lunes) la tabla epidemiológica registró cinco casos activos en los últimos 14 días.
Si bien, la cifra es menor comparada con los meses de agosto y septiembre, en diciembre hay mayor concentración de personas, la cual comienza desde el día 12, luego las posadas, convivios en los trabajos y en los hogares durante la Nochebuena, Navidad y Año Nuevo.
Así, la tendencia va al alza, al igual que el año pasado. Aunque la diferencia, es que en 2020, las vacunas anti-Covid eran un proyecto y ahora hasta el refuerzo será aplicado.
Después de casi 11 meses que Tulancingo estuvo en semáforo epidemiológico rojo, ahora se encuentra en naranja y será hoy (martes) cuando el Comité Jurisdiccional de Seguridad en Salud (COJUSESA), determine si permanece en este color o pasa a amarillo.
Actualmente, se contabilizan cuatro mil 794 contagios por 568 decesos, de los cuales solo uno ocurrió en las últimas tres semanas
Aún con la posibilidad de una cuarta oleada y de la nueva variante proveniente de Sudáfrica, conocida como Ómicron, el panorama es más halagador que el año pasado, cuando los hospitales tanto de este municipio como de otras regiones, estaban saturados.
El Hospital General de Tulancingo fue desconvertido y por ahora, hay una demanda del 33 por ciento de pacientes que presentan este padecimiento.
Hasta el mes de agosto, las camas con y sin ventilador, eran insuficientes y los pacientes tenían que esperar a que hubiera algún espacio en el Hospital General o en otros municipios ante la angustia de los familiares.
De igual manera, tanto en Tulancingo como en otras ciudades de la entidad y del país, se podían observar filas de personas incluso de madrugada para adquirir un tanque de oxígeno o realizar una recarga.
El titular de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), Alejandro Benítez Herrera, mantiene el llamado a la población funcionario también ha indicado, que las precauciones, como el lavado de manos, la aplicación de gel y sobre todo no aglomerarse, podría evitar una cuarta oleada de contagios por Covid-19