A pesar de las cuentas alegres, según se dice en las mañaneras, la realidad siempre ruda y cruel, nos hace ver que la violencia empañará los comicios de este domingo 2 de junio.
Tanto el presidente López Obrador como Rosa Iscela Rodríguez, responsable de la seguridad nacional, insisten que una veintena de personas relacionadas directamente con este proceso, han sido asesinadas, mientras que organismos ciudadanos aseveran que el número de fallecidos por ataques, suma más de 40. En el inter, en lo que va de la actual administración, el número de fallecidos, a lo largo y ancho de la República, ha llegado a 188,000 muertos, producto de la violencia, por lo que tampoco se entiende la aseveración oficial de que “vamos requete bien”, lo que tampoco es creíble para organismos internacionales que, hasta el momento, han enviado a mas de un centenar de observadores, a quienes nuestras autoridades les recomendaron a su llegada, que no se expongan para la conservación de su integridad.
Ante este panorama, expertos en la materia declaran que la política sobre seguridad, ha fallado por lo que la violencia se ha “normalizado” en el País, principalmente en estados como Chiapas, Guanajuato, Michoacán, Sinaloa, Guerrero, Jalisco, Nayarit, Estado de México Colima y Tabasco, quien lo dijera, terruño de López Obrador.
Esta ola de sangre, se asegura, es indicio de la falta de capacidad del Estado para cambiar de ruta en la materia…
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Además del chapulineo que sin rubor alguno hizo la exaspirante a la gubernatura del Edomex, Alejandra del Moral, para echarse a los brazos de Claudia Sheinbaum, quienes tambien dieron la nota fueron los afiliados a la Coordinadora Nacional de Trabajadores, quienes dicen que no retiraron su plantón de la plancha del Zócalo capitalino, sino que solo se hicieron a un ladito, para no entorpecer el cierre de campaña de los morenistas.
De a cómo sería la maiceada a los segundos y qué hueso le prometerían a la primera, para disfrutar en el futuro de sus respectivas manchicuepas…
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Esta columneja hace votos para que la elección del próximo domingo se efectúe con la mayor tranquilidad posible y que la división de poderes sea una realidad, con la finalidad de que en nuestra Patria se termine el presidencialismo de un solo Mesías del color que sea, en benecio del pueblo.