La terapeuta Martha Posadas Manzano, quien fue detenida con uso excesivo de la fuerza pública el lunes pasado, anunció que interpondrá una denuncia por lesiones y abuso de autoridad, en contra de los policías municipales de Pachuca, que la sometieron y contra Alexander Peñafiel Álvarez, titular de la Dirección de Reglamentos y Espectáculos, y Alfonso Rico Morales, de Protección Civil.
Indicó que recurriría a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJH), para iniciar la denuncia y solicitar a las autoridades que investiguen el actuar de los funcionarios públicos municipales, que la agredieron el 14 de febrero pasado.
Sonia Gutiérrez Ríos, asesora jurídica de la víctima de 57 años de edad, indicó que la denuncia será por los delitos de lesiones y abuso de autoridad, por lo que solicitarán que se determine el grado de culpabilidad de cada uno de los funcionarios públicos implicados tanto por acción, así como por omisión.
Luego de estos hechos, el alcalde de Pachuca, Sergio Baños Rubio, informó que el director de la Policía Preventiva, Rubén Gama Reyes, fue separado de sus funciones, así como las cuatro policías municipales, y puestos a disposición para realizar las investigaciones correspondientes.
A través de redes sociales, el presidente municipal priista indicó que los cuatro elementos de seguridad pública, serán juzgados por la Comisión de Honestidad y Justicia y la Secretaría de la Contraloría para que evalúen el comportamiento de los servidores públicos y realicen las sanciones correspondientes.
A través de rede sociales, circuló un vídeo en el que fue captado el momento en que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad del municipio, sometieron con exceso de la fuerza pública a la mujer, por no contar con todos los documentos de funcionamiento actualizados de su consultorio de terapia alternativa.
En el material gráfico, se escucha cuando la mujer sometida y bocabajo pide: “permítanme por favor, me están lastimando”, mientras que una de las oficiales le recarga todo su peso en la espalda de la víctima y con una de sus manos le empuja el cuello y cabeza contra el pavimento, y las otras dos intentan ponerle las esposas r