A casi un año de que la atropellaron, la salud de Consuelo Espinoza Díaz, de 85 años de edad, ha ido en decadencia, mientras que el presunto responsable del accidente, de nombre con iniciales J.G.G., ha evadido la acción legal, sin que haya cumplido con lo convenido para las curaciones y los gastos médicos.
Entrevistada en su domicilio, ubicado en calle Allende, la afectada dijo que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente, ya que sufrió fractura en un tobillo, además de golpes contusos en diferentes partes del cuerpo, mismos que actualmente le causan severos dolores.
Consuelo, tuvo que ser intervenida en una clínica particular, ya que cuando ocurrió el percance, el Hospital General de Tulancingo estaba saturado de enfermos por Covid-19.
Sin embargo, la familia gastó más de 50 mil pesos, mismos que tuvieron que conseguir, ya que son comerciantes y van al día, además por el tema de la pandemia no trabajaron durante varias semanas.
En tanto, J.G.G., de acuerdo con el abogado de la familia, ha gozado de impunidad porque el juez de control le fijó una caución mínima y aunque, en primera instancia, ante esta autoridad firmó un convenio donde se compromete a otorgar cinco mil pesos mensuales, solo lo hizo en una ocasión y a la fecha prácticamente se deslindó de este acuerdo, incluso no volvió a presentarse a las audiencias.
Los familiares, comentaron también que a Consuelo la tienen que trasladar hasta los juzgados ubicados en la colonia El Refugio. “Es un desgaste físico y emocional, la tenemos que llevar en taxi. Ella utiliza silla de ruedas y nos da mucho trabajo moverla”.
De acuerdo con información del abogado de la parte agraviada, J.G.G. fue vinculado a proceso, pero por otra causa penal y aun cuando hubo elementos suficientes para que fuera detenido, goza de libertad.
“Se trata de una mujer de la tercera edad, que ahora se encuentra discapacitada y no hay justicia para ella, hacemos un llamado al gobernador Omar Fayad Meneses, para que tome cartas en el asunto y a la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Yanet Herrera Meneses, para que considere que el juez de control no está llevando el caso adecuadamente”, dijeron familiares de la víctima.”
Recordaron que el accidente se suscitó el 24 de julio, en la calle Allende, de la colonia Zapotlán de Allende, donde según testigos de los hechos, J.G.G. era perseguido por otro vehículo y por ir a exceso de velocidad, chocó contra un automóvil que se encontraba estacionado justo cuando Consuelo iba a subir la banqueta.
“Al afectado del coche, sí le pagó los daños, pero a nosotros no nos ha respondido. Tenemos una deuda, porque hemos tenido que conseguir dinero, pero no ha habido justicia para nosotros como familia ni para mi mamá”, recriminó una de las hijas de la lesionada.
Consideraron que en este caso, se conjuntan la violencia de género, maltrato al adulto mayor y hasta discriminación porque la autoridad no les brinda un trato justo