Este martes, el Pleno del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil ratificó la demanda del Partido de los Trabajadores contra el presidente Jair Bolsonaro por propaganda electoral anticipada, por lo que le impuso una multa de 5.000 reales (algo menos de 1.000 dólares).
El acto juzgado tuvo lugar el 19 de abril cuando el mandatario dio un mitin en un templo religioso en la capital del estado de Mato Grosso, Cuiabá, con la intervención durante el espectáculo de una motocicleta.
En el Pleno del TSE no hubo unanimidad. Así, la magistrada María Claudia Bucchianeri destacó que en el evento no se utilizaron expresiones como “vota por mí” o “elígeme”, de manera que a su entender no hubo una solicitud de voto explícito para la candidatura de Bolsonaro. Otros dos magistrados apoyaron esta postura.
Sin embargo, el voto mayoritario, respaldado por cuatro magistrados, consideró que sí se trató de un acto de propaganda electoral. El togado Ricardo Lewandowski señaló que “la grandiosidad y organización de los actos y discursos que enfatizaron el mantenimiento del entonces Presidente de la República en el cargo caracterizan un acto de campaña”, según informa la nota de prensa emitida por el TSE.
“Analizando el conjunto de circunstancias en que se organizó el acto, lo considero un verdadero acto de campaña”, concluyó Lewandowski.
Bolsonaro se enfrenta al expresidente Lula da Silva en los comicios que se celebrarán en Brasil el próximo 2 de octubre. Las últimas encuestas conocidas dan la victoria al líder del Partido de los Trabajadores, con más de 15 puntos de diferencia sobre el candidato conservador.
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