Una de las promesas del gobierno de la 4T encabezado por Andrés Manuel López Obrador, fue el bajar los precios de la gasolina, promesa que después de ser analizada por sus asesores se corrigió a no aumentar el precio de combustibles por encima de la inflación.
Hoy, a poco tiempo de terminar su mandato, analizamos los resultados en materia de esta propuesta, de acuerdo con el informe de precios de las gasolinas, publicado por la Comisión Reguladora de Energía. La gasolina magna “verde” costaba en promedio 19.41 pesos en noviembre del 2018 y la gasolina Premium “roja”, tenía un precio promedio de 29.95 pesos y el diésel 20.78 pesos.
Los datos registrados al mes de septiembre de este 2024, como referencia de la Ciudad de México tenemos que los precios son, de la gasolina verde 24.18 pesos por litro, roja 25,89 y el Diésel en 25.64.
De esta forma sabemos que ni la propuesta inicial ni la modificada, se cumplieron ya que el aumento fue mayor a la inflación anual reportada por el INEGI (4.66%).
Dato que no solo se limita a lo anterior, ya que el gobierno de la 4T aplicó durante el sexenio estímulos fiscales para evitar que el incremento fuera mayor, bajar el IEPS para evitar los aumentos abruptos en el precio de la gasolina disminuye la recaudación para Hacienda.
Lo cual, pone en aprietos a las finanzas públicas del próximo gobierno, que ha sostenido que mantendrá un superávit primario, es decir, un saldo positivo entre los ingresos y el gasto público, sin considerar el costo de la deuda.
Efecto que no termina ahí, ya que el desbalance también tendría consecuencias para las finanzas de los estados, los cuales recibirían menos recursos por transferencias del gobierno federal.
Consideras que a 6 años de gobierno el país, ¿está mejor o peor?.
