En los últimos años se ha observado una alarmante pérdida del conocimiento de las culturas ancestrales entre la niñez mexicana, afirmó la diputada del Partido Verde Ecologista, Ciria Yamile Salomón.
Advirtió que esta situación no sólo pone en peligro la supervivencia de los valores y saberes tradicionales, sino que también refleja la falta de políticas públicas efectivas, orientadas a preservar y promover el patrimonio cultural indígena en las nuevas generaciones, como son las lenguas indígenas o maternas.
La legisladora por el estado de Hidalgo, comentó que la diversidad cultural en México es uno de los rasgos más significativos de su identidad nacional, con 68 pueblos indígenas reconocidos y una rica herencia cultural que se remonta a milenios.
“Es un hecho indiscutible que la pérdida del conocimiento de las culturas ancestrales entre las nuevas generaciones, no es exclusiva de nuestro país, pues es un fenómeno complejo y multifacético en el que la globalización y las megatendencias culturales, ha tenido un papel preponderante”.
Dijo que por lo que respecta a la niñez mexicana, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el año 2020 sólo 6.1 por ciento de la población mexicana se identificaba como hablante de alguna lengua indígena.
“Lo verdaderamente preocupante es que este porcentaje disminuye de manera significativa entre la población infantil y juvenil, pues según el Inegi, 70 por ciento de los niños indígenas menores de 5 años, no habla su lengua materna y la transmisión intergeneracional de estas lenguas, ha disminuido drásticamente”.
La diputada del Verde, manifestó que este es un indicador claro de la pérdida de conocimientos culturales, ya que la lengua es un vehículo fundamental para la transmisión de la cosmovisión, las tradiciones y los valores ancestrales.
Ante esta situación, Salomón Durán planteó que se realicen modificaciones al artículo 29 de la Ley General de Educación, a fin de que se sienten las bases de una política pública de Estado en materia educativa, en donde se establezca que los planes y programas de estudio en las entidades y localidades con población mayoritaria de comunidades indígenas o afromexicanas, se fomente el conocimiento, aprendizaje, reconocimiento y valoración de las culturas ancestrales, a fin de preservar y difundir su riqueza e importancia entre los educandos.
“La preservación del conocimiento de las culturas ancestrales no es sólo un acto de justicia histórica, sino también un imperativo para el desarrollo sostenible y la diversidad cultural”, insistió la diputada ecologista.