Por acuerdo derivado de la sesión del Comité de Seguridad en Salud, celebrada el 15 de junio, no se abrirán los panteones tanto de la zona urbana y rural, en este Día del Padre.
La determinación se tomó en virtud de que Tulancingo, se mantiene con riesgo epidemiológico y ante ello, es necesario mantener los esquemas preventivos y de contención.
Por diversos medios, se ha insistido a la población que la pandemia sigue activa, por lo que resulta apremiante tomar precauciones y no olvidar acciones, como el distanciamiento, lavado frecuente de manos y el uso de cubrebocas.
La reanudación de determinadas actividades, lleva implícito seguir aplicando medidas para minimizar los riesgos de contagio, al igual que posibles rebrotes.
El director de Panteones, Sergio Amador Hernández, destacó que solo este domingo 20 de junio permanecerán cerrados los cementerios.
Indicó que en caso de querer visitar tumbas para fines de aseo o llevar flores, la población puede acudir a partir del lunes, de ocho de la mañana a cuatro de la tarde.
Hay estricto control para evitar aglomeraciones o el ingreso de menores de edad y población vulnerable.
El aforo permitido en este momento para el panteón San Miguel, es del 20 por ciento, aunado a que los visitantes deberán respetar los lineamientos marcados por las autoridades sanitarias.
El presidente Jorge Márquez Alvarado, ha insistido que antes que todo está la salud de la población y en este sentido, cumplen con lo conducente para no exponerla ante cualquier situación de riesgo.
Dijo que más allá de un color de semáforo, la población debe ser solidaria y seguirse cuidando, en un momento complejo.
Existen personas que al haber recibido una o ambas dosis de la vacuna anticovid han dejado de cuidarse; sin embargo, el biológico es un apoyo, por lo cual las medidas siguen siendo necesarias para protegerse, así como a los demás