La aspirante a la presidencia de la República, la panista Xóchitl Gálvez, propuso que en el Muro de Honor del Senado de la República, se inscriba con letras en bronce dorado, la leyenda “Pueblos indígenas y afromexicanos, sustento pluricultural de la Nación”, como un justo reconocimiento de estos pueblos y comunidades que han moldeado, a lo largo de los siglos, el carácter pluricultural y a la identidad de la Nación Mexicana.
Dijo que la inscripción de esta frase es un justo reconocimiento a estos pueblos y comunidades que tradicionalmente se encuentran en el olvido por nuestras autoridades.
La senadora albiceleste informó que en México existen 68 pueblos indígenas y una innumerable cantidad de comunidades indígenas.
“De acuerdo con el Instituto Nacional de Pueblos indígenas, con base en el Censo de Población y Vivienda 2020, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la población indígena asciende 23,229,089 es decir el 19.4 por ciento de la población mexicana”, argumento la senadora por el estado de Hidalgo.
Añadió que de acuerdo con datos oficiales, de este segmento poblacional, poco más del 50 por ciento de la población afromexicana se concentraba, de acuerdo con el Censo 2020, en seis entidades: 303,923 vivían en Guerrero; 296,264 en el Estado de México; 215,435 en Veracruz de Ignacio de la Llave; 194,474 en Oaxaca; 186,914 en Ciudad de México y 139,676 en Jalisco.
La mayor parte de la diversidad cultural y de la biodiversidad de nuestro país, se encuentra en territorios indígenas y afromexicanos, quienes son propietarios de la cuarta parte de los ejidos y comunidades agrarias, de pequeñas propiedades y de los recursos naturales del país.
“México tiene una superficie de casi dos millones de kilómetros cuadrados y, de esa superficie, los pueblos indígenas y afromexicanos, poseen alrededor de una quinta parte del territorio nacional”.
Dijo que los pueblos indígenas y afromexicanos también aportan a la diversidad cultural de México, con sus distintos rituales y ceremoniales, con sus tradiciones y diferentes formas de pensamiento filosófico.
“También nos aportan su cuidado de la naturaleza y sus trabajos en la agricultura, el arte y la medicina tradicional. Estos son solo algunos indicadores y aportes sobre la población indígena y afromexicana en nuestro país, pero los números nunca van a reflejar la importancia sustancial de estos pueblos”, dijo.
Comentó que fue hace menos de una década cuando se empezó a consolidar la idea de que estos pueblos tenían derechos que debían reconocerse expresamente en nuestro texto constitucional.
De ahí que reiteró en la necesidad de inscribir en el Muro de Honor del Senado la leyenda “Pueblos indígenas y afromexicanos, sustento pluricultural de la Nación”.