En los últimos siete años, cerca del 50 % de las agresiones a periodistas han sido perpetradas por servidores públicos. De acuerdo con datos oficiales, en los primeros 36 meses del sexenio anterior, se registraron, más de mil 73 agresiones.
Por este motivo, integrantes de la LXV Legislatura Local instaron a la Procuraduría General de Justicia del Estado y, sea mediante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, Periodistas y Personas Defensoras de los Derechos Humanos, instrumente los protocolos de capacitación para los elementos de corporaciones policiacas, sobre el trato que deben proporcionar a los representantes de los medios de comunicación.
Fortunato González Islas, diputado de Morena destacó que uno de los principales conflictos que enfrentan reporteros en su actividad, es la actitud prepotente y, en algunos casos, agresiva por elementos policiacos, tanto estatal como municipales, quienes a falta de un protocolo de capacitación y sensibilización respecto al trato que deben tener hacia los representantes de los medios de comunicación, principalmente quienes cubre “nota roja”, se suscitan situaciones tensas, tanto para los periodistas como para los uniformados.
Por esta razón es importante diseñar el protocolo de capacitación para los periodistas, a efecto saber cómo conducirse, qué hacer cuando se cubran hechos relacionados con noticias de la llamada “nota roja”, lo que evitará se presenten roces, malos entendidos y altercados que escalen a una eventual agresión o situación violenta.
Hace unas semanas trascendió que la periodista independiente María Teresa Montaño, fue víctima de un secuestro exprés y de amenazas de muerte por investigar una presunta red de corrupción para desviar fondos públicos por cinco mil millones de pesos, a través de la firma de contratos con empresas fantasma, que involucra a servidores y exfuncionarios del gobierno mexiquense de Alfredo del Mazo, y a la excandidata a gobernadora Alejandra del Moral.
Dijo, Teresa Montaño, además de ser víctima de secuestro y amenazas de muerte, denunció que sus agresores, dos sujetos, se llevaron de su domicilio sus laptops, teléfono, grabadora de voz, cámara, libretas y documentos, no así la televisión y otros objetos de valor.
“La periodista independiente señaló que lo que querían era robarse la investigación y el mensaje fue claro, sin embargo, con la ayuda del periódico The Guardian y del Proyecto de Denuncia de la Corrupción y el Crimen Organizado, trabajaron con Teresa Montaño durante seis meses, para que su investigación saliera a la luz”, apuntó el legislador.