Aunado a la saturación de hospitales públicos por la pandemia de Covid-19, ahora se han escaseado en Tulancingo los tanques de oxígeno.
Dos de las distribuidoras más importantes en el municipio, una ubicada en el centro de la ciudad y otra a la altura del libramiento La Joya, no tienen productos en existencia.
Aunque la mañana de ayer (lunes) en este último establecimiento, se informó que contaban con el servicio de llenado de tanques portátiles, para realizar la compra hay que ingresar a una lista de espera.
Los costos para su adquisición van de acuerdo con la capacidad de los mismos; por ejemplo, un tanque de 682 litros puede tener un costo de entre seis mil y siete mil pesos, mientras que la carga de un cilindro varía entre 300 y dos mil 500 pesos.
Familiares de enfermos de Covid-19, coinciden en que tanto en el Hospital General como en el ISSSTE e IMSS, los médicos han padecido por la escasez de herramientas básicas, incluido el oxígeno y tienen que hacer pedidos a proveedores, pero los envíos son tardados.
La oficina receptora de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), con sede en Tulancingo, no ha recibido queja alguna respecto a altos costos ni condicionamiento en la compra de tanques con oxígeno.
Por el momento, quienes quieran adquirir oxígeno deberán anotarse en una lista y esperar a que el distribuidor les llame.
Trascendió que este tema ya fue tratado por las autoridades, por lo que en primera instancia se han reforzado las medidas para evitar que los contagios se propaguen, ya que es un suplicio para los familiares encontrar esta herramienta, que es vital para los pacientes con coronavirus