El distribuidor vial Tulancingo-Acatlán, con una longitud de 400 kilómetros, presunta algunas inconsistencias en el piso de rodamiento.
Aunque todavía no se anuncia la fecha de su inauguración, el puente elevado cuyo costo fue sueperior a los 160 millones de pesos, fue abierto a la circulación vehicular el 31 de julio.
En esta obra, se observa falta de acabado en el pavimento, justo a unos metros de las instalaciones de Bomberos y Protección Civil, sobre el carril de la lateral derecha, circulación a Tuxpan.
Ademas, en este trayecto, previo al crucero denominada Acatlán, se encuentran dos postes de concreto de CFE, que ocupan parte de la cinta de rodamiento, los cuales no fueron reubicados por la paraestatal, pero que quedaron como estorbo para la correcta vialidad en este tramo.
El distribuidor vial, cuya construcción fue anunciada en julio de 2023 y los trabajos comenzaron en diciembre de 2023, carece además de señalamientos.
Los automovilistas locales aplican el programa vial “Uno por Uno”, pero los foráneos no conocen esta reglamentación y en ocasiones ni siquiera disminuyen la velocidad, al pasar por esta zona.
Los cierres sin previo aviso, son un inconveniente como se muestra en estas imágenes, donde los conductores tienen que hacer improvisadas maniobras, para incorporarse a los otros carriles.
Otro temaa tomar en cuenta, es que al cruzar el puente con dirección a Tuxpan, se generan congestionamientos viales, ya que al concluir éste tramo, hay filas vehículos que son detenidos por el semáforo, ubicado en el cruce con la calle Narciso Mendoza.
Esta obra, representa mayor funcionalidad para automovilistas, operadores y usuarios del transporte público de pasajeros y del transporte pesado, pero presenta estos inconvenientes.