A casi un año de que una jauría atacó a una señora de la tercera edad, en la colonia Los Álamos, el problema prevalece, ya que en la calle Jiménez y en un acceso que entrelaza a esta demarcación con la Central de Abasto PIFSAL, hay perros que asechan a los vecinos.
La titular de la dirección de Salud, Erika Miralrío Medina, dijo que en este sector hay una mujer, que dice ser ambientalista y protege a los animales.
“Cuando llega el personal de capturas, espanta a los perros, los insulta, incluso les ha aventado piedras a quienes van a realizar su trabajo”.
La funcionaria, agregó que en este caso los vecinos tendrían que acudir al Ministerio Público (MP), con sus evidencias y ahí, los canalizan a una mesa especial.
“Con una orden emitida por esta autoridad, ya podemos acudir con argumentos jurídicos y con la Policía, para atender este tema con una mayor seguridad”, explicó.
Miralrío Medina, advirtió que durante esta temporada las personas son más proclives a ataques caninos, pues las hembras andan en celo y algunos dueños echan sus mascotas a la calle, lo cual provoca que las jaurías vayan en aumento.
Luz Durán Hernández, enlace vecinal de la referida demarcación, dijo que recientemente otra persona de la tercera edad estuvo a punto de ser atacado cerca de un terreno y de no ser por la ayuda de los colonos, las consecuencias hubieran sido mayores, por lo que es necesario que las autoridades actúen con mayor firmeza.