La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por la pérdida de tejido óseo, por tanto, aumenta la posibilidad de tener fracturas. Los huesos están sometidos a un remodelado continúo mediante procesos de formación y reabsorción, pero, a medida que aumenta la edad, desafortunadamente también lo hace la pérdida de hueso. Solamente cuando la densidad mineral ósea se encuentra por debajo de un valor determinado se torna un proceso patológico.
Existen factores genéticos que modulan la magnitud de la masa ósea en la vida adulta, pero ésta depende del tipo de alimentación y la cantidad de ejercicio físico realizado durante la infancia.
Existen tres períodos importantes para la prevención:
- En la infancia y la pubertad.- en esta etapa a través de una alimentación correcta y ejercicio se debe de alcanzar la máxima densidad ósea. La prevención de la Osteoporosis empieza en esta etapa. Los huesos son un tejido vivo que están en continuo crecimiento alcanzando su máximo tamaño al inicio de la vida adulta. El ejercicio es un factor fundamental para determinar cuando el calcio se deposita en él. Hay que preferir el ejercicio de alto impacto y de carga para mejores resultados
- Durante la edad adulta.- Aquí se deben evitar factores secundarios que interfieren con la absorción de los nutrimentos con una dieta adecuada, el sedentarismo o el uso de medicamentos que puedan disminuir la densidad máxima ósea. Cuando se ha alcanzado la densidad máxima ósea, ésta se mantiene por un proceso continuo en el cual se destruye el hueso viejo (resorción) y se construye un hueso nuevo. Esto es lo que mantiene los huesos fuertes a lo largo de la vida. Cualquier factor que ocasione una mayor velocidad de este proceso provocará una pérdida más rápida de la masa ósea y, por lo tanto, los huesos se volverán más frágiles. En esta etapa es necesario realizar un consumo adecuado de calcio y vitamina D, ejercicio y evitar tomar alcohol, no fumar y consumir con moderación café.
Durante la Menopausia.- en esta etapa es cuando se degrada más el hueso, debido en gran parte a la disminución en la producción de estrógenos. En este período es importante recomendar una dieta rica en calcio, magnesio, potasio, vitamina C y K, vigilar el consumo de vitamina D, la actividad física y la terapia de reemplazo hormonal. Durante esta etapa la pérdida de masa ósea continúa especialmente en la cadera y la columna vertebral provocando fracturas. La alimentación es muy importante en esta edad para evitar un balance negativo de calcio. En este período se recomienda suprimir el consumo de alcohol totalmente.
Existen varios nutrimentos involucrados en la aparición de la osteoporosis, el calcio es el que más llama la atención, por lo anterior es necesario consumir alimentos altos en este mineral, por ejemplo leche, yogurt, queso, almendras, sardinas, brócoli, col y tortilla de maíz. También hay que evitar el consumo de cafeína y sal, ya que estos provocan la pérdida de calcio a través de la orina. Vigile su consumo de fibra ya que un exceso de ésta inhibe la absorción de calcio. El diagnóstico oportuno y temprano especialmente después de los 50 años de edad es el primer paso. ¡¡¡Baje de peso e Inicie un nuevo estilo de vida!!!
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