Para mejorar la capacidad de respuesta a la emergencia y los desastres, además de fortalecer la cultura de la prevención, ayer (lunes) se realizó un simulacro de sismo en la presidencia municipal, con el que Tulancingo se sumó a las acciones para saber cómo actuar ante el impacto de un movimiento telúrico.
A las 11.30 horas sonó la alerta y dio paso al protocolo de actuación, para que funcionarios y servidores públicos, así como personas que se encontraban al interior del edificio, se dirigieran por las rutas de evacuación hasta llegar a los puntos de reunión.
De acuerdo con la nueva normalidad, servidores públicos previamente capacitados por la dirección de Bomberos y Protección Civil, verificaron que todo se realizará conforme la planificación del ensayo. que estuvo basado en una hipótesis de sismo con magnitud 8.1.
Jesús García Ávila, director de Bomberos y Protección Civil, destacó que una de las preocupaciones del presidente Jorge Márquez Alvarado, es reforzar y mejorar las acciones preventivas de comunicación y así, proporcionar una respuesta eficaz ante situaciones reales de emergencia, privilegiando la seguridad humana y la autoprotección.
De manera especial, se cuidó la aplicación de medidas sanitarias, como el uso de cubrebocas durante todo el simulacro y el distanciamiento, además de que al retornar a sus áreas, el personal cumplió con la desinfección, lavando sus manos con agua y jabón o bien aplicando gel antibacterial.
Otros propósitos del ejercicio de ayer (lunes), es que el personal de nuevo ingreso a la alcaldía, se familiarice con el sonido de la alerta, incluso medir el grado de adaptación de la colectividad a la nueva normalidad.
En suma, fue un ejercicio serio que reafirmó que la fuerza está en la prevención, donde Tulancingo avanza día a día, de ahí que sea importante estar siempre preparados ante cualquier eventualidad o fenómeno natural