La activista Ana Lara, lamentó que el movimiento feminista en la entidad llegue fracturado y con agendas propias al ocho de marzo, en un contexto de grave dificultad para las mujeres, derivado de la pandemia de Covid19
Explicó que las colectivas de Hidalgo, habían acordado no marchar para conmemorar el ocho de marzo, como una manera de apoyar al personal de salud que se encuentra en primera línea. Sin embargo Marea Verde y algunos grupos, decidieron salir a la calle.
Señaló que pese a estar de acuerdo en la marcha, no en algunos contextos como el de romper vidrios del Tuzobús, no es la manera inteligente de hacerse escuchar, ya que la ira debe estar dirigida a las instituciones, que no han atendido las demandas, consideró.
Vandalizar la infraestructura que está dirigida a la población vulnerable y sin posibilidades económicas, únicamente afecta a estos donde se incluye a muchas integrantes de estas colectivas.
El 2021 indicó, es ya un año sumamente difícil para las mujeres debido a que la pandemia ha originado una mayor pobreza entre las mujeres, además de violencia y desempleo que ha ocasionado un retroceso.
Ante ello es necesario que se pueda replantear el trabajo de las activistas, ya que de continuar en esta línea de desencuentros y fracturas, no se podrá avanzar en la lucha por mejores condiciones para las mujeres y serán ellas, las afectadas.
El que haya grupos con agendas e intereses personales o de grupo, es algo que debe de preocupar a las colectivas, que deben de sentarse a conciliar desacuerdos y poder avanzar