El comercio establecido de Tulancingo, sigue varado en su economía y pese a que las autoridades municipales y sanitarias, les han permitido trabajar casi de manera normal, durante varias semanas las ventas fluctúan entre el 35 y 40 por ciento de lo que vendían antes de que llegara la pandemia.
Librado Morales Sánchez, integrante de la agrupación Comercio Establecido de Tulancingo (CETU), reconoció lo anterior e indicó que esperan, que el regreso del cierre comercial a las 20:00 horas, a partir del martes 18 de mayo, beneficie a este sector.
“La ampliación del horario de cierre, se determinó en la reunión que tenemos todos los martes con las autoridades municipales y sanitarias, por lo que los compañeros ya no estarán obligados a cerrar a las siete de la noche y podrán aprovechar una hora más”.
Sin embargo, subrayó que mantendrán las medidas de bioseguridad, pues seguirán vigentes las inspecciones por parte de las autoridades sanitarias, además, tienen el compromiso y solidaridad para con sus clientes.
Morales Sánchez, lamentó que las ventas sigan bajas, pese a tener más horas de trabajo. “Cuando nos cambiaron la hora de cierre, de seis de la tarde a siete de la noche, no tuvimos un incremento en las ventas, esperamos que al cerrar a las 20:00 horas nos signifique un alza, aunque reconocemos que la economía de la gente no es la mejor”.
El 10 de Mayo, fecha en que se celebró el “Día de las Madres” registraron un ligero repunte en sus ventas, pero no fue suficiente porque después de esa festividad a la fecha, las ventas han seguido bajas.
Finalmente, dijo que no tienen el número de negocios afiliados a la CETU que han cerrado sus puertas, pero se darán a la tarea de verificarlo porque cada vez son más las cortinas vacías y en renta

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